jueves, 16 de abril de 2009

Editorial Diario Libre, 15 de abril

AM. - El aborto

El tema del aborto, o de protección de la vida humana, que son dos cosas diferentes, es controversial y se presta a dogmatismos, pero cualquier persona medianamente racional, estará de acuerdo con que debe ser reglamentado.

El aborto, como se sabe, es la interrupción del embarazo, pero la iglesia católica lo ha llevado hasta la concepción, no dejando ni siquiera un resquicio para aquellos casos que, para una persona razonable, parezcan necesarios.

La posición irracional debe ser rechazada.

La ley es, en realidad, un balance entre valores. Se castiga el valor considerado malo (el homicidio), pero aún estos valores negativos pueden ser positivos, cuando se trate de legítima defensa, en cuyo caso, la ley sopesa el valor del agredido frente al del agresor y otorga el veredicto en favor del agredido.

Existen casos en materia de aborto en que se enfrentan disyuntivas similares: ¿A quién salvar, a la madre o a la hija? Cuando este conflicto se presenta, una persona facultada, el médico, toma la determinación, siempre a favor de la madre, que es el valor vivo frente al "por nacer".

Son cuestiones de orden ético, pero también práctico, que tienen que ser tomadas en cuenta por el legislador.

Y así ha sido, al punto que Italia, país donde tiene su sede el Vaticano, o España, nación de donde nos llega el cristianismo, no tienen en sus constituciones una fórmula como la propuesta en nuestro país, que tendría implicaciones sobre el uso de anticonceptivos y la investigación científica, que nadie, por más católico que sea, puede aceptar.

Ese artículo debe ser modificado.

atejada@diariolibre.com

De Diario Libre

No hay comentarios:

Publicar un comentario